El contenido de carbohidratos se modifica reduciéndolos hasta los requerimientos
mínimos, aportando en su mayor proporción los denominados complejos. Además,
esta dieta es alta en fibra dietética, para que el paciente se sienta saciado
más rápidamente y disminuir la glucosa y triglicéridos en sangre.
La proporción de
hidratos de carbono se debe reducir a 40- 50% máximo del valor calórico total,
de los cuales el 95% deben ser carbohidratos complejos y 5% simples; los
lípidos se incrementan vigilando que sean mayormente grasas mono y
poliinsaturadas.
Indicaciones
de uso:
î
Diabetes 1
î Diabetes
2
î Obesidad
î Síndrome
metabólico
î Hipertrigliceridemia
Guía
de alimentos: Leche descremada, yogurt light, pollo, res, ternera, cerdo, pescado,
clara de huevo, huevo completo, jamón de pavo (quitando partes grasas), quesos
panela, cottage y requesón; frutas con menos del 10% del contenido de hidratos
de carbono, como ciruela roja, melón, durazno, fresa y jícama; arroz, avena,
bolillo, tortilla y pan de caja integrales, frijol, lenteja, haba, garbanzo,
soya, alubia, alverjón, aceites de girasol, oliva, soya, canola, aguacate,
nuez, almendras, cacahuate, piñón, pistache, nuez de la india y bebidas light
(sin calorías).
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